Si quieres mejorar tu rendimiento, debes planificar más cosas que no solo tus entrenamientos, como por ejemplo tu nutrición. ¿Has probado la Paleo Dieta?
Con demasiada frecuencia en el mundo del running sólo recibes el mensaje que tienes que obtener calorías, independientemente de la fuente. Por desgracia, este enfoque simplista no es la mejor apuesta y puede conducir a consecuencias desastrosas el día de tu carrera.
¿Estás preparado para conocer la Paleo Dieta? Este protocolo nutricional ha ganado popularidad en los últimos años. Hacia el año 2005, cuando aparecían las primeras referencias a la Paleo Dieta, había pocas fuentes de información disponible. Sin embargo, en la actualidad hay una gran cantidad de documentación al respecto.
¿Es la Paleo Dieta tan recomendable como se comenta?
Eso depende de la versión que apliques. Al igual que con cualquier tipo de protocolo nutricional, a medida que más personas investigan al respecto más variaciones aparecen. En lugar de entrar en mucho detalle con la Paleo Dieta, vamos a centrarnos en los aspectos clave.
En palabras del Dr. Loren Cordain, autor del libro La Paleo Dieta (Wiley & Sons, 2002),
la clave de la Paleo Dieta es simplemente imitar los grupos de alimentos que comieron nuestros antepasados con los alimentos de hoy en día que podemos encontrar fácilmente en nuestro mercado e incluso en nuestro jardín.
En otras palabras, si se trata de un producto que crece a nivel local y que es de temporada, o si se encuentra en un estado salvaje (en el caso de la carne, pescado, aves de corral) es algo que debemos comer. Si no es así, no debemos.
La premisa de este enfoque es igualmente simple: la investigación ha demostrado una alta correlación con el consumo de alimentos comunes en la dieta típica de hoy y una alta incidencia de muchas enfermedades, que van de leves a severas.
Cuando los productos alimenticios tales como cereales, productos lácteos, carbohidratos refinados y azúcares, sales y aditivos comprenden la mayor parte de la dieta, se producen varias consecuencias negativas para la salud, a partir de una condición llamada intestino permeable y la inflamación en todo el cuerpo.
Si bien algunos podrían ver la Paleo Dieta como restrictiva o extrema, no es así. Si tienes en cuenta todos los productos frescos que puedes comer, la amplia gama de opciones de proteínas y las infinitas combinaciones que puedes crear, entonces la Paleo Dieta no es para nada aburrida.
Si eres nuevo en el concepto y quieres algunos conceptos básicos sobre cómo empezar, aquí tienes cinco consejos para iniciarte con la Paleo Dieta. Recuerda que en lugar de preocuparte en lo que no estás comiendo (cereales, productos lácteos, azúcares), debes centrarte en lo que sí que comes.
1. Añade verduras
Una vez hayas añadido verduras a tu dieta, entonces añade más verduras. En la actualidad pocos deportistas ingieren suficientes verduras. Cada comida, sin considerar tu ingesta durante los entrenamientos, debe tener una buena porción sólida de verduras frescas de temporada. Cuanta más variedad mejor. Dado que las verduras tienen de 7 a 11 veces la cantidad de fibra que contienen los granos de cereal, no debes preocuparte por la falta de ella.
2. Añade grasas buenas
Demasiados deportistas siguen atrapados en la mentalidad de consumir alimentos con un bajo contenido en grasa o, peor aún, libre de grasa. Mediante la incorporación de aguacate, aceite de oliva, aceite de coco, algunos frutos secos crudos con moderación, así como algunos pescados el salmón o el bacalao, proporcionas a tu cuerpo una dosis sólida de todos los ácidos grasos que necesitas y que ayudan a sentirte saciado en cada comida, mantener tus niveles de energía constante durante todo el día y apoyar todos los sistemas de tu cuerpo.
3. Dale sabor
¿Piensas que un trozo de carne es aburrido y monótono si no está empapado en salsa? Si comes alimentos frescos, puedes realmente apreciar el sabor real de la carne en sí, o el pollo o el pescado. Puedes elegir entre una gran variedad de hierbas y especias frescas o secas para complementar los sabores, en lugar de enmascararlos. Las posibilidades son mucho más numerosas de lo crees.
4. Come más a menudo y come equilibradamente
Si comes equilibradamente en términos de asegurarte que cada comida contenga una buena proporción de carbohidratos complejos (que vienen principalmente de verduras), proteínas procedentes del pescado salvaje, animales alimentados de manera natural y una buena dosis de grasas buenas, descubrirás que estás más saciado, tienes un nivel de azúcar en la sangre más equilibrado y mantienes tu nivel de energía durante todo el día.
5. No creas lo que dicen
Que los corredores tienen que comer cada día pasta para prepararse para el entrenamiento y las carreras, o que tienes que entrenar únicamente con productos de nutrición deportiva a base de azúcar refinado. Siguiendo diariamente un protocolo de Paleo Dieta mejoras el metabolismo de tu cuerpo para que obtenga más eficientemente los hidratos de carbono y queme las grasas malas. A medida que incrementa la exigencia de tu rendimiento, se hace más efectivo disponer de un buen metabolismo.
(fuente: TrainingPeaks)